Construye bases sólidas

Y mantén tu equilibrio emocional.

Diariamente estamos expuestos a vivir situaciones que nos generan altos niveles de estrés provocados por; las presiones del trabajo, la rutina del hogar, un asunto de salud, los problemas financieros, un asalto, las responsabilidades adquiridas en la escuela/universidad/negocio o un accidente. Cuando vivimos cualquiera de estas experiencias, pareciera que la vida nos pusiera a prueba para determinar la firmeza de nuestro ser, hasta llevarnos a reconocer si somos personas capaces de sobrevivir a los vientos, a las lluvias y tormentas a los que nos expone el mundo.

En ocasiones este tipo de condiciones nos pueden generar molestias con las personas que están en nuestro entorno, mal genio, grandes preocupaciones que nos impiden hallar la salida del conflicto, también puede provocar fuertes discusiones, ofensas y malos entendidos por los comentarios de otros en medio de las conversaciones.

Si algunos de estos argumentos resuenan contigo o con alguna persona cercana a ti, es importante que sepas que estas interpretaciones son exclusivas de la persona que lo siente. También es posible que a nivel emocional estas situaciones estén generando cualquiera de estas emociones; agresión, cansancio, desamparo, enfado, furia, irritación, lástima, odio, pesadumbre, rencor, terror y zozobra.

Mi invitación para hoy es que reflexiones acerca de la situación que vives actualmente y aprendas a identificar las oportunidades de aprendizajes que este tipo de experiencias quieren regalarte y sobre todo a determinar la solides de tus bases emocionales en medio de situaciones difíciles. También necesito que sepas que Dios quiere que todos los seres humanos vivamos con gozo, paz, tranquilidad y alegría, pero si tu dejas entrar lo negativo a tu vida pones todo lo maravilloso por fuera, ya que el espacio que le das a lo positivo en tu mente es muy limitado o nulo.

Esto me mueve a preguntarte ¿Qué nivel de estrés manejas en tu vida?

Para combatir el estrés es necesario saber cuáles son los síntomas que pueden estar afectando tu cuerpo (dolor de cabeza irritantes, insomnio, tensión muscular, fatiga, malestar estomacal) e identificar los cambios en tus estados de ánimo (inquietud, falta de motivación o enfoque, sentirse abrumado, irritable, enojado, triste o con depresión). También es necesario vigilar los comportamientos que nos ayudan a aumentar o a reducir los niveles de estrés en nuestras vidas.

Una de las emociones que más nos aumenta los niveles de estrés es la ansiedad, ya que cuando la sentimos, somos más propensos a tener problemas en la escuela o en el trabajo, tenemos una mala calidad de vida, abusamos en el consumo de sustancias, tenemos problemas digestivos, dolores crónicos y aumentamos la posibilidad de tener una enfermedad grave causado por la gran preocupación que tenemos de la situación a futuro.

En medio de ese proceso nos podemos encontrar con una serie de actitudes, sentimientos y sensaciones que pueden dar la voz de alarma e indicarnos que necesitamos buscar apoyo a nivel profesional para tratar los síntomas. También es importante mantenernos activos en actividades que nos hagan sentir bien con nosotros mismo y sobre todo a que nos ayuden a aliviar las preocupaciones.

Mi recomendación es averiguar y probar cuáles son las actividades que funcionan mejor para usted; salir a caminar, bailar, tejer, pintar, decorar, montar en bicicleta, nadar, técnicas de meditación, yoga, dietas, ir al gimnasio, tomar una clase nueva, intente aprender de libros, videos o recursos en línea.

Hay un proverbio chino que dice: “la tensión es quien crees que debería ser. La relajación es quien eres”

Por eso es importante aprender a establecer prioridades en tu vida, decidir qué cosas se deben hacer y qué cosas deben esperar, a decir “no” si te sientes abrumado con tantas tareas. Todo esto te ayudara a mantener un equilibrio emocional frente a la situación que vives hoy.

En este preciso instante quisiera que empieces a verte como una persona capaz de disfrutar cada instante de tu vida, enfocado en lo que ha logrado hasta el momento y dispuesto a disfrutar tiempo de calidad al lado de las personas que amas.

Recuerda ¡una mente en calma trae fuerza interior!

Mi labor como facilitador de tu ser emocional, consiste en acompañarte a vivir tu proceso de aprendizaje, escuchar tu historia de vida y ayudarte a reconocer las creencias/juicios/emociones que han determinado la forma como observas la realidad que vives hoy pero que necesitas disolver urgentemente para cambiar o transformar la realidad que percibe tu observador.

Te invito a que me sigas en todas mis redes sociales como compartir experiencias.