¿Y qué es el Síndrome del Impostor?
Debo confesar que hasta hace algunos años no tenía conocimiento profundo al respecto de lo que es un síndrome del impostor, recuerdo vagamente haber escuchado sobre este síndrome durante mi estudios de pregrado y otro tanto durante el posgrado, pero nunca me detuve sobre el mismo hasta que me topé con un par de pacientes que desde consulta dejaban entrever síntomas relacionados con este diagnóstico.
Así que comencemos desde el principio ¿Qué es un síndrome del impostor? “El Fenómeno del Impostor es un constructo que busca identificar individuos que son exitosos de acuerdo a estándares externos, pero tienen una idea persistente de incompetencia personal” (Clance & Imes, 1978).
“En consecuencia, sufren de un miedo perpetuo a “ser descubiertos”, es decir, a que los otros van a descubrir que la persona no es auténticamente inteligente o hábil, sino un “impostor”. Cercano al perfeccionismo desadaptativo, este constructo pone énfasis en el fenómeno atribucional detrás de la imposibilidad de los individuos de agenciar su propio éxito”.
El padecimiento de este trastorno es más habitual de lo que creemos, según la doctora Valerie Young, siete de cada 10 personas lo han sufrido a lo largo de su vida y es que estos sujetos están severamente preocupados por no ser tan exitosos y capaces como los demás creen.
Atribuyen sus logros en las distintas áreas de su vida al azar, las circunstancias favorables, sus aptitudes en el ámbito social e incluso como un error en la percepción que tiene los demás sobre ellos.
En términos generales hay una incapacidad para aceptar las habilidades personales que los llevan al éxito y los logros, atribuyen y externalizan los mismos.
¿Pero, por qué se produce este síndrome, qué lo ocasiona? ¿Cómo se desarrollan estos síntomas? Existen diversas causas con respecto a este síndrome que va desde las ambientales hasta las cognitivas.
Es de conocimiento que todo sujeto tiene su historia y su personalidad se estructura dentro unas dinámicas específicas como las familiares, personas que han vivido fuertes críticas y exigencia desde el plano familiar, comparaciones, altos estándares de comprobación para el éxito influyen en el desarrollo de estos síntomas.
Características de su personalidad, la auto exigencia e incluso la forma como el sujeto percibe la realidad, por ejemplo hay personas que tienen un locus de control externo, el falso esquema o creencia de que todo cuanto realizan tanto éxitos como fracasos se deben agentes que no dependen de su control si no a causas externas como el azar entre otros.
¿Cómo se debe intervenir desde la psicoterapia? Desde la intervención terapéutica lo que se pretende es educar al sujeto con respecto al concepto de responsabilidad, trabajar sobre los elementos cognitivos realizando una reestructuración con el fin de que se logre una apropiación de los éxitos y los logros personales.
Así como, desconfirmando los pensamientos de incompetencia e incapacidad, incentivando el locus de control interno, que logre identificar y aceptar los logros o situaciones que dependen de su responsabilidad y su capacidades.
Por Lina Medina Alvis, Psicóloga Clínica
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